Una dulce compañía en el matrimonio
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Cuando Dios dijo que no era bueno que el hombre esté solo, se refería a que el matrimonio proporcionaría al hombre y a la mujer una compañía, alguien que estuviera a su lado: física, emocional y espiritualmente, en los buenos y malos momentos de la vida. Ambos tendrían a alguien semejante a él o a ella con la capacidad de dialogar, de ser escuchado y comprendido, alguien para amar y sentirse amado. Juntos caminarían lado a lado para cumplir el propósito de Dios sobre sus vidas.
Cuántos matrimonios adolecen hoy de esta característica. Han aprendido a ser buenos padres, buenos esposos, hasta buenos proveedores de lo que necesitan; pero se han olvidado de ser buenos "amigos". Antes de casarse lo eran, pero la rutina y la falta de una buena comunicación los llevan a separarse emocionalmente.
Friedrich Nietzsche, un reconocido filósofo dijo: "En los matrimonios infelices no es el amor lo que falta, sino la amistad". Amistad que debe ser desarrollada, mucho más si están a punto de casarse.
La amistad en la pareja desarrolla una relación de confianza: confianza en ti mismo, en Dios y en los demás. Amistad es caminar juntos en una sola dirección, con una misma meta: La de ambos. Es tener intimidad emocional, compartir nuestros sentimientos y pensamientos más profundos, nuestros ideales, nuestras tristezas.
El libro de los Proverbios dice acerca del amigo: "En todo tiempo ama el amigo, y es como un hermano en tiempo de angustia" (Prov. 17.17) Un amigo es alguien que está presente siempre, en los buenos y malos momentos, es alguien que ama incondicionalmente, alguien que es fiel y leal. Alguien que te hace reír, que te hace creer que vale la pena vivir, alguien que está allí para sacarte de la frustración.
"Un amigo es alguien que llega cuando otros se han ido".
Por ello es que Dios instituyó el matrimonio para proveer esa confianza que necesitamos a través del Compañerismo. Nuestro cónyuge no sólo es alguien a quien amamos y con quien quisiéramos compartir toda nuestra vida, ella es nuestra compañera, ella debiera ser nuestro/a mejor amigo/a, él/ella está para evitar nuestra soledad.
Una forma de comprobar si una relación incluye amistad es quitar por un tiempo las conexiones románticas. Si a tu relación le quitaras los besos y los abrazos, ¿quedaría algo? Piénsalo.